Red Interdiocesana de Comercio Justo
Conoce la red y las Cáritas que participan en ella. Puedes acercarte a tu tienda más cercana y descubrir todos los productos que ofrece. Anímate a participar en sus actividades.
La Red Interdiocesana de Comercio Justo de Cáritas está compuesta por 28 organizaciones diocesanas que trabaja el comercio justo dentro del marco de la economía solidaria como herramienta de sensibilización y transformación social.
Entendemos el comercio justo como parte de una estrategia más global con acciones y prácticas que hacen posibles otras relaciones económicas, situando en el centro a la persona y un instrumento clave para conjugar una tarea de:
- Presentar un modelo económico y social alternativo, construido sobre unas bases diferentes, en las que la persona, la sostenibilidad de la vida y el cuidado de la creación son el centro.
- Información y sensibilización sobre otras realidades.
- Promover debate sobre las relaciones económicas desiguales y que generan exclusión social.
- Fomentar actitudes responsables y solidarias.
Todas las experiencias de comercio justo en Cáritas nacen y se ejecutan de manera integrada con otras líneas y programas de acción social.
Criterios de trabajo de la Red
- Hacer visibles a las personas y los procesos que intervienen en la cadena solidaria del comercio justo.
- Sensibilizar a la comunidad y acompañar a los grupos de voluntariado.
- Fortalecer los grupos productores y aprovechar las oportunidades de diálogo, corresponsabilidad y hermanamiento.
- Compromiso con nuestro modo de vida.
- Fomentar actitudes responsables y solidarias.
Tiendas y puntos de venta
En las tiendas y puntos de venta se ofrecen productos de comercio justo (alimentación y artesanía) pero también otros que provienen de la economía social y solidaria como ropa de reciclada y de segunda mano, productos de empresas de inserción, productos ecológicos, biológicos, de la agricultura local, artesanías locales o de pequeñas cooperativas de países del Sur.
Se promueven otras prácticas y acciones que vinculan comercio justo con el consumo responsable y promoción de la economía social y solidaria tales como grupos de consumo, reciclaje solidario, inserción laboral en el Sur y en España, desarrollo rural y local e iniciativas de ahorro y otras gestiones a través de la banca ética.