“Tengo dos grandes apoyos que no me fallan, mi familia y amigos, y Cáritas”
Manuel ha pasado de ser niño acogido a tener la tutela de sus dos hermanos.
“He pasado de ser un niño acogido a ser un acogedor”. Así resume Manuel Arias, un joven de 21 años de Jerez de la Frontera, su historia de vida marcada por las dificultades, pero también por la superación y la responsabilidad. Cuando era pequeño, fue acogido por sus tíos después de que sus padres perdieran su tutela. Hoy, ya mayor de edad, tiene en acogimiento permanente a sus dos hermanos de 15 y 12 años.
“No he tenido una infancia como la de un niño cualquiera. Cuando un niño se ponía a leer o se ponía a jugar, yo tenía que hacerme mi desayuno con cinco años o me ponía a hacer la comida para mi padre y hermanos”, recuerda Manuel. Aquella etapa difícil le llevó a desarrollar “un instinto de supervivencia” y la fortaleza que ahora le permite cuidar de su familia.
Compagina sus estudios de grado superior con un trabajo a tiempo parcial en una empresa de animación sociocultural, donde realiza actividades como campamentos o extraescolares. “Es una empresa que puedo compaginar con el estudio”, explica. Aun así, reconoce que “económicamente no es suficiente” para mantener a sus hermanos, por lo que recibe una ayuda estatal por acogimiento y la orfandad de su padre.
Redes de apoyo
Además, tiene dos grandes redes de apoyo que sabe que “no le van a fallar”. “Una son mis tíos y mis amigos, y otra es Cáritas”. En efecto, desde que asumió la tutela de sus hermanos, Manuel cuenta también con el apoyo de Cáritas Asidonia-Jerez, que le ha ofrecido acompañamiento psicológico para los menores, ayuda económica para rehabilitar la vivienda familiar y apoyo social para facilitar su conciliación. “Sin la ayuda de Cáritas yo no podría hoy tener esta estabilidad a nivel social y económico”, afirma.
A este respecto, el IX Informe FOESSA señala que, entre los hogares sustentados por jóvenes menores de 29 años, el 15,8% se encuentra en exclusión severa y el 36,4% en exclusión total; más del doble de la media nacional.
El futuro
Manuel es ahora voluntario en Cáritas Joven de Jerez, donde acompaña a personas en situación de exclusión social. “Es algo que me llena y me ayuda a distraerme un poco de mi problema y tener mi espacio”, explica.
¿Y cómo se plantea su futuro? Voy a terminar mi grado superior y quiero hacer CAFID u opositar para la Guardia Civil”, concluye este joven voluntario.

