El segundo fin de semana de marzo se celebró el III Encuentro de Voluntariado Joven de Cáritas. Durante el encuentro, pudimos conocer a mucha gente de diferentes Cáritas Diocesanas. Un total de 95 jóvenes de 26 Cáritas de toda España convivimos, trabajamos en equipo, debatimos y nos reímos mucho.

Ayudar y aprender

A lo largo de todo el fin de semana se reflejó cómo es el voluntariado joven de Cáritas: gente con ganas de aprender, ayudar, conocer y llenarse de personas y experiencias nuevas. Personalmente, para nosotros, ser voluntario también se basa en esas ideas: es invertir tiempo en las personas y disfrutar haciéndolo; es ayudar, pero también dejar que te ayuden a ti; es escuchar y aprender; es intentar aportar un granito de arena para que el mundo sea un poco más bueno y más humano.

Comprometidos

Los voluntarios y voluntarias jóvenes en Cáritas somos necesarios porque, aunque no podamos ofrecer demasiado tiempo por los estudios, el tiempo que dedicamos lo hacemos de corazón y con mucho compromiso. Además, tenemos ideas y propuestas nuevas que pueden servir a la entidad para acercarse tanto a los jóvenes como a la sociedad actual.

Gracias a Cáritas somos más sensible y más tolerantes con el mundo que nos rodea, porque nos ha dado la oportunidad de conocer y conectar con la realidad que muchas personas no quieren ver. Nos ha dado libertad para aportar nuestro punto de vista, y también un espacio para poder desarrollarnos como personas y así poder acompañar a otras personas en su proceso vital.

Retos

Creo que podemos conseguir retos muy enriquecedores y necesarios para la sociedad porque somos muchos los jóvenes que estamos comprometidos con un cambio que haga que el mundo sea más justo, más bueno y más acogedor. Trabajar esto desde un punto de vista como el que se trabaja en Cáritas, facilita que nos acerquemos poquito a poco a esa meta que todos perseguimos. Esto también es importante para entender el impacto que tiene nuestro voluntariado en el día a día al hablar de ello en comunidad.

Creemos que conectar con la comunidad es esencial, no solo para que podamos expresar nuestras ideas e innovaciones, sino también para dar visibilidad a nuestra actuación y motivar a más jóvenes para el voluntariado y que se pueda contribuir de forma intergeneracional. Allí donde vayamos queremos que las personas sientan que tenemos todas las ganas para poner nuestro granito de arena y que vean que esto sirve para algo y para mucho más de lo que creen. Por todo esto creemos que deberíamos visibilizar más la labor de Cáritas e intentar que más personas se sumen a nuestra misión.