Acción social06/11/2023

“Cuando tienes una hipoteca de casi 700 euros y del paro cobras 800 es casi imposible vivir”

Laura tiene 47 años, está divorciada y un hijo de 14 años. Actualmente está sin trabajo con una incapacidad parcial. Laura participa actualmente en el Programa Accede.

Laura tiene 47 años, está divorciada y un hijo de 14 años. Vive en una casa en Villamediana de Iregua (municipio de La Rioja que limita con la capital, Logroño). Desde hace un tiempo tiene muchos problemas para poder pagar su hipoteca. Por problemas de salud se vio obligada a coger una baja médica. Al regresar a su puesto de trabajo, la despidieron.  Actualmente está sin trabajo con una incapacidad parcial. Laura participa actualmente en el Programa Accede.

Este proyecto piloto, que se lleva adelante en 18 Cáritas diocesanas, está dirigido a las personas más “desconectadas”, es decir, aquellas que no están accediendo al sistema de protección social del Estado (IMV, servicios sociales…). La propuesta es trabajar con estas personas en varios niveles: la cobertura de necesidades básicas (facilitando el acceso al IMV), en la activación y en el desarrollo de capacidades sociales y laborales y compartiendo espacios comunitarios que fomenten su integración social (creación de redes de sociabilidad).

El testimonio de Laura

Me llamo Laura. Tengo 47 años. Tengo un hijo de 14 años y una casa en hipoteca en Villamediana de Iregua. Compré el piso en el peor momento del mundo, con lo cual la hipoteca era muy elevada. Lo compré yo sola porque en aquel momento mi sueldo era muy diferente al que tuve después y en aquel momento podía hacer frente yo sola.

Pero bueno, después la cosa se ha ido complicando y nació mi hijo en ese trayecto, con lo cual la cosa se complica aún más. Ingresos ahora mismo: tenía un trabajo. El trabajo fue lo que me terminó superando. Tuve que coger la baja, me despidieron por coger la baja y estando de baja, pues los médicos decidieron que estaba bien, que volviera a trabajar.

Con lo cual dejé de cobrar baja. Dejé de cobrar todo. Llevaba cuatro meses sin cobrar de ningún sitio porque iba al Ayuntamiento y por unas cosas o por otras, como entre otras cosas, valoran el año anterior los ingresos que has tenido del año anterior y demás. No cuadraban las cuentas, no me pertenecía (no reunía los requisitos para) ninguna ayuda ni nada de nada y llevaba cuatro meses sin cobrar cuando empezó el proyecto Accede que fue lo que me ayudó bastante.

Ya conseguí empezar a cobrar el paro. Pero cuando tienes una hipoteca de casi 700 € y del paro cobras 800. Pues vivir con eso, con un niño de 14 años, pues es complicado. No. Es casi imposible.

-¿Qué le supone esos ingresos? ¿Cómo haces en el día a día con estas cantidades?

-Pues con muchos malabares y quitándote cosas, claro, vas al supermercado y en principio procuro no ir con mi hijo porque te duele el decirle que no puedes comprar queso. A día de hoy el precio qué está el queso, por ejemplo, cosas sencillas y te las tienes que quitar porque no son básicas para vivir y tienes que empezar a quitar de un sitio del otro.

Inventar comidas con nada. Sacar una comida de cuatro elementos básicos. Y gracias a Dios tengo familia que me ayuda, pero lógicamente cada uno tiene que mantener su casa, no pueden mantener a la vez también la mía. Entonces pues haciendo muchos malabares y privándome de cosas que en otro momento me hubieran parecido normales y básicas. Y a día de hoy pues ya lo ves de otra manera y entiendes que no son tan básicas y que puedes prescindir de ellas.

Pues hombre, que fuera en fiestas de Villamediana y no puedas salir a una degustación, no. Coincidió que era el cumpleaños de mi hijo y le regalaron sobre todo dinero para que pudiera salir y montarse en alguna atracción, porque desde luego de mi casa no podía salir nada. Era implanteable darle dinero para que se fuera a las atracciones. Hay que quitar de todos los sitios que se puedan y eso no es primordial.

Pero en una infancia, que, aunque ya está entrando en una adolescencia, pero no deja de ser un niño, además, aunque tenga 14 años, es niño todavía. Es duro vivir con eso. Tengo suerte que es razonable y hablas con él y se lo explicas y lo entiende todo, pero no deja de ser un niño. Cáritas me ha ayudado muchísimo en lo que me ha ido haciendo falta en cada momento.

El mes que no he cobrado, por ejemplo, pues entendían que lo más importante era la hipoteca, pues me han pagado la hipoteca o me han dado el dinero para pagar la hipoteca. Me ha hecho falta pagar la luz, hacer lo que fuera, dinero para comida, tarjetas para poder ir al supermercado a comprar comida si el niño necesitaba algo del colegio, o sea en todos los aspectos: ropa, calzado o cualquier cosa que hemos necesitado.

Necesitaba una cama porque la cama que tenía el pobre era de cuando era pequeño y no teníamos para una cama y ellos me ayudaron a comprar la cama que ya no quiere salir de ella. Pero que pueda tener una cama nueva y adaptada para él, porque claro, ya tiene cuerpo, ya es más grande, con lo cual necesita una base firme y ahora mismo la tiene para poder descansar bien.

-¿Algo más que valores aparte de la ayuda económica?

-Ha habido mucha ayuda psicológica porque al final, por mucho que te ayuden económicamente, si no estás bien psicológicamente, no puedes hacer nada más, no puedes avanzar en nada. Y estaba en un colapso, de lo cual me han ayudado a salir con el crecimiento emocional, con los talleres, compartiendo, con los compañeros; el ver, aunque no sea un consuelo, el que haya más gente con problemas.

Pero, pero sí, en el fondo sí es un consuelo el ver que no todo te pasa a ti, no eres la única a la que le pasan cosas, sino que hay más gente que está en la misma situación y con un poquito de apoyo. Pues muchas veces eso, eso ya basta. El que te enseñen a pedir ayuda, porque yo no he sido de pedir ayuda nunca y es duro, cuesta, pero a veces no queda otra vía que hacerlo, ¿no?

Pues ahora me encuentro muchísimo mejor. Por lo menos el tiovivo de mi cabeza ha parado. Tiene el movimiento justo que queda de inercia. Pero bueno, nos han enseñado sobre todo a ser autosuficientes y es lo que han intentado, que seamos autosuficientes y que podamos hacer todo por nosotros mismos.