Viviendo el voluntariado
D. Ángel Fernández nos anima a seguir trabajando por los demás, buscando formas nuevas para acercar a Dios a nuestros hermanos y vivirla desde lo más profundo de nuestra alma.
Queridos amigos “voluntarios de Cáritas”: qué orgullo de nombre y qué gran misión está realizando al servicio de los más necesarios en las diócesis de Castilla-La Mancha. Gracias por vuestra generosidad, talante y buen hacer. Seguro que recibís, al menos tanto como dais y os dais. En realidad, mucho más, aunque aparentemente no tienen mucho que ofreceros. Contaréis con su amistad y la satisfacción de un trabajo bien hecho
Este mundo en que vivimos, maltratado por el individualismo, el egoísmo, la pandemia de la Covid-19, los malos políticos y gobernantes, donde crece el paro, faltan alimentos, mueren tantas personas, faltan recursos en nuestros pequeños pueblos, donde los mas desfavorecidos se están quedando solos, aislados, sin médico, sin futuro, sin cuidados, sin casi cariño,…. os necesitan. Os necesitamos como agua de mayo que penetra suavemente en la tierra, fortalece las semillas, hace crecer los tallos y da frutos abundantes. Con entrega, con humildad y cercanía, casi sin hacer ruido os metéis en el corazón de las personas y sois buenos misioneros, samaritanos, sanadores, sembradores y testigos del amor de Dios que a través de vosotros se hace caridad, presencia amorosa en sus vidas .
Que la Cuaresma y la Semana Santa que celebraremos nos sirvan de empuje y fuerza para que, como buenos Cirineos, ayudemos a Cristo, que está en los mas desfavorecidos, a llevar su Cruz subiendo hasta el monte para poder decir, en la Noche Santa de la Pascua, con los Ángeles. ¡Aleluya! Ha Resucitado. Por eso os quiero animar a seguir trabajando, buscando formas nuevas para acercar a Dios a nuestros hermanos y vivirla desde lo más profundo de nuestra alma. Os tengo muy presentes en mis oraciones y os doy las gracias por vuestros trabajos tanto en las Cáritas parroquiales, como a nivel diocesano y, en especial, por el testimonio cristiano, nada fácil, que dais en ya la sociedad en que nos ha tocado vivir .Le pido a Dios que os transforme poco a poco en “piedras vivas” de nuestras Iglesias Diocesanas y en verdaderos apóstoles suyos.
Deseo ardientemente que, durante la Cuaresma y la Semana Santa, que no se suspende, celebréis y viváis con una especial hondura y espiritualidad los actos religiosos y oficios litúrgicos en vuestras parroquias o donde os venga mejor, respetando las medidas sanitarias establecidas. Ofreceros a los sacerdotes de vuestras parroquias ya las Juntas de las Cofradías y Hermandades para colaborar, con creatividad y generosidad, en los actos que se desarrollaron en el interior de los templos. Todos podemos asistir y ayudar en algo. Todos tenemos nuestros valores y cosas buenas. Todos nos enriquecemos más y el Señor nos irá modelando como Él sabe hacerlo, haciéndonos crecer interiormente y siendo para los demás testigos de su amor y portadores de caridad.
Rezad por el fin de la pandemia a Dios Nuestro Señor ya su Madre Santísima, la Virgen María, y recibid mi afecto, oración y bendición por vosotros y vuestras familias.