Soñando fraternidad
La caridad es mirar delante, con la vista puesta en los demás, es un abrazo, una escucha, verse en la piel de los demás. Es el motor que mueve cada día a nuestro voluntariado. Así nos lo cuenta Reyes, uno de nuestros voluntarios, esta poesía que comparte con nosotros.
Gracias Señor por decirnos
cómo es la caridad
y que podamos sentirnos
cercanos a su bondad.
Es hermana de la fe
y también de la esperanza
ojos para el que no ve
es libertad sin fianza.
Es esa palabra hermosa
que da sentido a la vida
es vuelo de mariposa
sobre una estepa perdida.
Es el cofre que encierra
los tesoros del consuelo
que se practica en la tierra
y que se premia en el cielo.
Es dormir con el orgullo
de haber sido generoso
sabiendo que algo tuyo
tiene otro dueño gozoso.
No permitir que tu hermano
duerma a estómago vacío
es ese calor humano
que llega donde hace frío.
Es mirar hacía delante
sin perder de vista al pobre
caminar y sin cansarte
que de lo tuyo le sobre.
Es un abrazo, una escucha
darle valor al momento
ser soldado de su lucha
y no caer en desaliento.
Es verse en el migrante
en la piel del refugiado
no dudar ni un instante
que está Jesús a su lafo.
Es la calma, es la prisa
el silencio a viva voz
que el llanto se torne risa
con una entrega veloz.
Es una manera de actuar
un bienestar en el alma
con una fuerza de amar
que al egoísmo desarma.
Gracias por habernos mostrado
como la caridad debe ser
que no es de brazos cruzados
cuando hay tanto que ofrecer.
