Acción social

Jere-Jere, apoyo a mujeres víctimas de violencia

Que están en contexto de prostitución y son víctimas de trata con fines de explotación sexual.

Una visión rápida

  • Quién lo hace: Cáritas Valencia.
  • En qué consiste: Atención integral a mujeres victimas de violencia machista.
  • Participantes: 98 mujeres mujeres que están en contexto de prostitución y/o posibles víctimas de trata con fines de explotación sexual; que sufren o han sufrido cualquier tipo de violencia (física, psicológica, emocional, sexual); mujeres en grave situación de exclusión social y/o especial vulnerabilidad que ejercen la prostitución.
  • Presupuesto: 143. 565 €.
Jere Jere significa poco a poco en uno de los dialectos africanos que hablan las mujeres que participan en el programa.

Por qué desarrollamos este proyecto

La violencia machista es la máxima expresión de un sistema estructural de desigualdad e injusticia social, y una violación grave de los derechos humanos de las mujeres.

Sus formas de manifestación son múltiples: sexuales como físicas, laborales, psicológicas… pero las más extendidas en España y en las mujeres que acompañamos desde Cáritas son:

  • Violencia y malos tratos en el ámbito doméstico.
  • Contextos de prostitución de exclusión social.
  • Trata con fines de explotación sexual.

Todas estas situaciones suponen graves violaciones a los derechos de las mujeres, como el derecho a la vida, integridad física y psíquica, dignidad y libertad. El número de mujeres víctimas de violencia de género aumentó un 2,0% en el año 2019, hasta 31.911. De estas, el número de víctimas mortales ha sido de 55, cifra más alta que el año anterior.

Cáritas acompaña a más de 80.000 mujeres en situación de exclusión social, a través de 42 proyectos diferentes en más de 40 localidades de todo el país. Entre estos, se desarrollan actualmente 28 programas de acompañamiento a mujeres víctimas de violencia machista y en 2019 se atendió en 15 provincias españolas a 3.738 mujeres en contextos de prostitución, siendo la mayoría de ellas víctimas de explotación sexual, y de éstas, en unas 300, se han detectado indicios de trata. 

En Caritas Diocesana de Valencia en los últimos años, hemos ido percibiendo el cambio en el modo de operar de las mafias que trafican con las mujeres. Hemos percibido la alta movilidad en las mujeres que hemos ido viendo en calle, así como un descenso importante de las mujeres que están ejerciendo la prostitución en los contextos habituales que visitamos. Sabemos que están, pero no en la calle, son poco accesibles a los proyectos de las entidades sociales, dado que se encuentran recluidas en clubes y sobre todo en viviendas privadas, no localizadas.

Cómo trabajamos

El proyecto está dirigido a apoyar a las mujeres víctimas de violencia machista, a recuperar su dignidad, su autoestima y la capacidad de decisión sobre sus vidas, en el reconocimiento de sus derechos fundamentales y en el desarrollo de un proyecto de vida libre y autónomo.

A través de éste, Cáritas Diocesana de Valencia dirige un equipo de profesionales y personas voluntarias que realizan la toma de contacto y el acompañamiento a estas mujeres con las que se inician itinerarios de inserción individualizados.

Mediante el conocimiento mutuo y la relación de confianza que se establece, creamos una vinculación que permite desarrollar con ellas un plan de trabajo individualizado (PAI), en el que articulamos sus necesidades y demandas.

Intentamos en este proceso, aproximar a las mujeres y hacerles accesibles, los recursos sociales normalizados (sanitarios, jurídicos, educativos, laborales, de vivienda…), a través de itinerarios de acompañamiento individualizados. Todo ello, encaminado, a hacer efectivos sus derechos e intentando empoderarles en la toma de decisiones de manera autónoma.

Cada situación personal, requiere de unos medios diferentes, pero lo habitual es comenzar por mejorar el aprendizaje del idioma a quien lo requiera, el acceso a derechos sanitaros, sociales, etc…, y todos los aspectos educativos relacionados con sus hijos. Así mismo iniciamos itinerarios de inserción socio-laboral, desde niveles básicos de habilidades pre laborales, formación para el empleo, etc…

Por otro lado, a través de las visitas domiciliarias, conocemos mejor su situación, y vamos practicando las habilidades sociales que mejor se adaptan a nuestra cultura; desde cocinar, administrar la compra, conocer nuestras costumbres de cuidado de la casa, todo ello con la intención de irles acercando a nuestros usos y facilitarles el acceso a puestos de trabajo y previamente, a recursos formativos y de carácter pre laboral. Éstas se realizan generalmente, en fases avanzadas de la intervención, cuando el vínculo se ha estrechado más y con un número reducido de familias.

También se les ofrece información general y personalizada sobre aspectos jurídicos y administrativos, en relación a la documentación de residencia en nuestro país, y otros temas legales de diferente calado.

En definitiva, se trata de poder encontrar con cada una de las participantes, una alternativa de vida que les aleje de la prostitución. Para ello, permitirles ganar en autoconfianza y en autoestima, es vital para enfrentarse a su situación, y requiere de un acompañamiento a largo plazo y muy intensivo.

Atención integral

Recuperación de las mujeres víctimas de violencias machistas a través de una atención integral, basada en sus demandas y necesidades, respetando sus ritmos, evitando la re-victimización. Esta acción está dirigida a todas las mujeres atendidas en el programa.

Vivienda

Alojamiento de seguridad para algunas mujeres y sus hijos/as que se encuentren en especial situación de vulnerabilidad. La vivienda cuenta con un máximo de 6 plazas.

Contacto personal en los lugares de prostitución

De este modo logramos llegar a las mujeres que ejercen prostitución y/o son víctimas de trata con fines de explotación sexual, ofreciendo una atención integral, y haciéndolas protagonistas de sus propios procesos. Esta acción se realiza en medio abierto, locales y pisos, como puerta de entrada al programa.

Actividades

El acompañamiento y la presencia junto a las mujeres que participan en el programa toma forma a través de diversas actividades.

  • Visitas a lugares de prostitución.
  • Servicio de acogida y atención, entrevistas individuales.
  • Visitas domiciliarias.
  • Talleres de salud.
  • Talleres de contextualización y castellano.
  • Acompañamientos jurídico/administrativos.
  • Acompañamientos sanitarios.

Nuestros proyectos necesitan tu apoyo, cada gesto cuenta.