Andalucía vaciada: ¿odres nuevos para vinos viejos?
A la memoria de Don Gabino.
A su vuelta del Concilio, terminada la última sesión, Don Gabino Días Merchán era el Obispo más joven de España. Obispo de una diócesis, la de Guadix, gravada por serios problemas sociales que en el año 1966 estaban desangrando la población. Del censo de 1960, un 20,58 % había salido de la comarca de Guadix. De la de Baza un 18,25 %, y de la de Huéscar un 25,6 %. en gran número camino de Cataluña, en donde se establecería definitivamente un 75 % de los emigrados.
Ahora que está de moda hablar tanto de la “España vaciada” y de la “Andalucía vaciada”, quiero traer al conocimiento de muchos el proyecto del “Plan Social Diocesano” que encabezó este Obispo movido por “los grandes principios elaborados por el Concilio Vaticano II en la Constitución Pastoral Gaudium et Spes”.
Siguiendo las fases de la pedagogía activa, Don Gabino quiso conocer “científicamente” la situación socio-económica de su diócesis, para lo cual puso en manos de un equipo técnico de Cáritas de Barcelona dirigido por Pedro Bordes Roca el que se llama y está editado por Cáritas, “Estudio Socio-Económico de la Diócesis de Guadix-Baza.”
El Estudio se compone de tres partes, a nivel diocesano, a nivel de zonas y a nivel de poblaciones, con un estudio estadístico prolijo de muy diversos aspectos de la realidad de este territorio diocesano, localizado en la parte noroeste de la provincia de Granada. Pertenece a la Andalucía interior, que comprende las once zonas que la Junta identifica en riesgo claro de despoblación, entre ellas la de la “Hoya de Guadix-Baza”. Se veía venir, de 166.000 habitantes, que poblaban este territorio diocesano en el periodo 1960-1965, hoy, a penas lo habitan 100.000 personas.
A la emigración, se une también la llamada “brecha demográfica” con una baja natalidad y un aumento de personas mayores que en bastantes casos viven solas , a veces en poblaciones pequeñas, con escasez de equipamientos públicos e infraestructuras básicas.
Se veía venir, porque la realidad que se describe en este “Estudio” y a la que se quiso “poner remedio” desde una concepción nueva de Cáritas, orientada hacia la promoción social, a impulsos del amor fraterno, despertó cuando menos la extrañeza de que una diócesis promoviese un Plan Social, y la sospecha de una injerencia en el terreno de lo temporal, influyendo excesivamente en las cosas terrenas.
Pero, sobre todo, lo que pretendió el “Plan”, fue la implicación de las personas en un proyecto comunitario de promoción, mediante la formación, los cursillos de desarrollo comunitario y la asamblea general, para el compromiso de lo que llamó Don Gabino “esta hermosa aventura de la caridad”.
La zona de Guadix logró constituir los equipos de vivienda, sanidad, educación y promoción económica, creando las cooperativas de confección industrial y agro-ganadería. Baza funcionaba ya con un Plan Social organizado por Cáritas Española, con la colaboración de Cáritas alemana. Pero este benemérito prelado, pasó fugazmente por Guadix, siendo nombrado Arzobispo de Oviedo en 1969.