Las Cáritas Parroquiales no se limitan a dar repuesta a las principales demandas provocadas por la crisis (alimentación, vivienda, acceso al empleo…). Más allá, su tarea consiste en hacerse cercana a las personas, reivindicar su dignidad, buscar con ellos respuestas a sus necesidades y descubrir sus potencialidades.
Las Cáritas Parroquiales son además una oportunidad de compromiso y solidaridad para las personas que se implican participando en los equipos o con aportaciones económicas.
Finalmente, pretenden ser un espacio de coordinación con otras entidades generando, con ellas y con la sociedad, una red de ayuda, promoción y sensibilización.