La convocatoria de nuevas elecciones generales para el 26 de junio supone para Cáritas un momento de presencia en la vida pública en defensa de la dignidad y el acceso a los derechos de todas las personas. ¿Cómo? A través de las Propuestas Políticas: un decálogo de mínimos que nuestros gobernantes, presentes y futuros, deberían tener en cuenta de cara a garantizar el acceso a los derechos humanos de todas las personas, y que nuestra Confederación hace públicas con el objetivo de “contribuir a la construcción de una sociedad cohesionada, justa y fraterna, a partir de la realidad de las personas en situación de mayor vulnerabilidad a las que acompañamos”.
Estas propuestas de Cáritas se inspiran en la llamada lanzada por el Papa Francisco a la XX Asamblea General de Cáritas Internationalis celebrada en Roma en mayo de 2015 a ser parte de “una Iglesia accidentada, herida y manchada por salir a la calle, antes que una Iglesia enferma por el encierro y la comodidad de aferrarse a las propias seguridades”.
Otras de las fuentes de inspiración de este documento es la instrucción pastoral “Iglesia, servidora de los pobres”, aprobada en abril del año pasado por la Conferencia Episcopal Española, donde se apuesta por la defensa de cinco principios sociales: el destino universal de los bienes, la solidaridad y defensa de los derechos humanos, el bien común, la subsidiariedad, y el derecho a un trabajo digno y estable.
Los materiales que ofrecemos a continuación permiten, por una parte, profundizar en el contenido de dicho decálogo desde la identidad eclesial de Cáritas, como se refleja en la introducción del Documento de Propuestas. En segundo lugar, y a través de materiales con un contenido más esquemático, tener presente cuáles son esos 10 mínimos que Cáritas considera imprescindibles.