Casi 30 años después de que el Programa de Empleo iniciase su andadura, Cáritas sigue apostando por una intervención social que contribuya a la reducción del desempleo. La gravedad de la situación socioeconómica actual nos ha llevado a tener que redoblar nuestros esfuerzos y continuar trabajando con empeño para lograr nuestro objetivo.
En todo este tiempo, hemos ido conformando un saber hacer en la tarea de apoyar a aquellos que tienen más dificultades para encontrar y mantener un empleo. Se han desarrollado estrategias y metodologías adaptadas a las personas y hemos ido configurando el modelo de inserción laboral de Cáritas, basado en la participación de personas como protagonistas de sus propias vidas.
En 2009, más de 95.500 personas acuden a nuestros servicios, y de ellos, más de 14.500 consiguen un empleo. Se han impartido casi 900 cursos y talleres para 16.000 personas, así mismo, se continúa apostando por la generación de empleo social, cerca de 500 personas trabajan en empresas de inserción impulsadas por Cáritas.
Como Iglesia, nos ponemos al lado de esas miles de personas que buscan una mano tendida para salir adelante. Por ello, como expresión del amor preferencial de Jesús por los más necesitados, ponemos nuestro tiempo, capacidades y recursos al servicio de aquellas iniciativas de inclusión sociolaboral que les posibilite una vida digna.